Hay lugares que cautivan pese a que su paisaje no merezca estar en la lista de Patrimonio Unesco, hay espacios que cautivan al ojo, incapaz de retirar la vista de una panorámica de 180 grados en la que es difícil captar más belleza. Uno de ellos es la Carretera de Transfăgărășan, un recorrido conocido como el «Camino de las nubes».
La Carretera de Transfăgărășan cruza la cordillera montañosa de Fagaras, al sur de los Carpatos, conectando las regiones de Valaquia y Transilvania. Sale de Curtea de Arges hasta acabar en el condado de Sibiu en el pueblo de Cartisoara.
Los 92 km de recorrido de la DN7C se cubren en dos o tres horas a una velocidad media de 40km/h, pasando por varios puentes, viaductos, y un túnel de casi 1 km de longitud, que funciona con ventilación manual, y que no cuenta con iluminación.
En el recorrido podemos ir parando en el arcén para ir sacando fotos del espectacular trazado, pero sobre todo, Transfăgărăşan es para los amantes de la conducción un reto de sucesión de curvas de alta montaña inigualables.
La historia de su construcción no trae buenos recuerdos para los rumanos puesto que fue ejecutada por el dictador Nicolae Ceauşescu como un proyecto faraónico y muy complejo que tuvo un alto coste de vidas. Tras la invasión de Checoslovaquia en 1968 por parte de la URSS, Rumanía, que había abierto una tercera vía frente a la guerra fría, quiso facilitar el movimiento de tropas ante un eventual ataque soviético. De hecho, el cambio de manos de regiones como Transilvania que pasó de Hungría a Rumanía, y el de Besarabia, ansiado por los rumanos, generaba continuas disputas territoriales.
Por ello entre 1970 y 1974 se llevaron a cabo las obras que significaron un despliegue de hombres nunca antes visto en el país. Además de soldados, en los trabajos se emplearon ingenieros y obreros civiles, que gracias a las voladuras de 6.000 toneladas de dinamita, fueron dibujando la sinuosa carretera. Las cifras oficiales hablan de un centenar de muertos, muchos de ellos no hallados tras precipitarse montaña abajo.
Son varios los puntos de interés en el recorrido de la carretera de Transfăgărășan, comenzando por el Lago Vidraru, presente durante buena parte de la conducción; el Castillo Poienari, antigua residencia del Vlad III el Empalador, el personaje histórico en el que se inspiró Bram Stoker para si novela Drácula. Otro es el Lago Bâlea y el Balneario. El lago es de origen glacial y es el punto de más alto del recorrido. Aquí podemos llegar por la carretera o por el funicular que conecta el balneario con las faldas de la montaña.
Anualmente la etapa reina del Tour de Rumanía se suele celebrar aquí, con una dureza que se puede comparar a la de las etapas especiales del Tour de Francia o el Giro de Italia.
Cuándo recorrer la Transfăgărășan
Conviene tener muy presente las condiciones climatológicas antes de intentar cruzarla. Las alertas por desprendimientos o nieve son muy frecuentes en esta zona donde el clima es muy cambiante. De forma habitual está cerrada entre octubre y junio, si bien a veces aún podemos recorrerla en noviembre o que en pleno agosto un cambio de tiempo debido a las lluvias torrenciales y los desprendimientos la obligue a cerrar.
Cuando llegamos a la población de Curtea de Arges nos avisan de si el tramo montañoso está abierto o permanece cerrado y debemos optar por la carretera alternativa, más «normal» y menos enrevesada.
Miguel
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Quiero hacerla en Bici MTB , se puede? mejor época?
Gracias
Aitor Pedrueza
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Hola Miguel! La mejor época es el verano porque en invierno las condiciones climatológicas mandan y es posible que la vayan cerrando y abriendo de forma interrumpida. S i te animas estaremos encantados de ver tus fotos. Saludos