La situación en cuanto a la infraestructura hotelera de Rumanía ha cambiado notablemente en el curso de los últimos años. Agotado el 1989 el tiempo de los hoteles estatales, espartanos cuando no ruinosos a los ojos del turista europeo o norteamericano, en 1990 comenzó la privatización de las empresas hoteleras, lo que tuvo como consecuencia la creación de nuevos y modernos complejos y la remodelación de los de la época socialista.
En algunos casos, las obras de mejora se han llevado a cabo sólo en algunas plantas, de ahí que en un mismo hotel pueda tener dos categorías diferentes, con la consiguiente diferencia en el precio (en tales casos, es oportuno enterarse bien de a qué categoría pertenece la habitación que ocupa). De cualquier modo, hay que tener presente que, prescindiendo de la categoría, los hoteles rumanos son muy caros en relación al nivel de vida general y que, aun recurriendo a hoteles sin grandes lujos, el gasto en alojamiento será lo que desequilibre el presupuesto cuando se viaja a Rumanía, ya que en el resto de los precios resulta un país muy competitivo.
Alojamientos para todos los gustos en Rumanía.
En Rumanía, como en el resto de Europa, los hoteles están clasificados según cinco categorías que se corresponden con el número de estrellas en orden decreciente (5 es categoría de lujo). Es raro el caso en que la clasificación oficial no se corresponda con la calidad real del servicio, pero es una buena norma echar un vistazo a la habitación antes de quedarse con ella. El precio de la habitación incluye por lo general (aunque no siempre) alojamiento y desayuno. Una habitación simple cuesta alrededor de un tercio menos que una doble. En las categorías inferiores se encuentran los moteles, situados en las autopistas, las carreteras de interés turístico y junto a las pequeñas y grandes localidades.
Buscador de hoteles y alojamiento en Rumanía
Para quienes, en lugar de hotel, prefieran otro tipo de propuestas que varían según la región que se visita y el interés del viajero. Una experiencia interesante puede se pernoctar en la hospedería de un monasterio, mientras que en las principales localidades de la costa del Mar Negro (Mamaia, Eforie, Venus), del valle del Prahova (Sinaia, Predeal, Poiana Brasov) y en las localidades costeras se alquilan apartamentos privados o chalets que garantizan al viajero una mayor independencia.
En Rumanía existen alrededor de un centenar de campings, distribuidos por todo el territorio nacional y situados en zonas de particular interés paisajístico y a lo largo de itinerarios turísticos. La mayoria disponen de un cierto número de bungalows (câsute) de madera o de obra, duchas de agua caliente, cocina y restaurante. En las poblaciones de la costa, a orillas de los lagos y en el delta del Danubio, se puede alquilar material deportivo. Con respecto al turismo juvenil, desde hace unos cuantos años se han creado albergues juveniles y no solo para jóvenes. En realidad se trata casi siempre de hoteles, a veces de buen nivel, que ponen a disposición de los clientes más jóvenes habitaciones económicas.
Turismo de aventura y en casa de los habitantes.
Los amantes de la montaña disponen de un tipo de alojamiento característico de Rumanía, las llamadas cabane. Estas cabañas son refugios que desembocan en una red de senderos numerados y muy bien señalizados. Su nivel varía: algunas parecen elegantes casas de campo, confortables y sugerentes, con numerosas habitaciones y servicio de restaurante; otras tienen el aspecto de refugios de alta montaña, provistos de camastros y agua fría. En general, se trata de chalets acogedores y prácticos donde poder pasar la noche y en los que se informa sobre el estado del tiempo y los senderos. Muchos se encuentran en lugares aislados y sólo permanecen abiertos durante el verano. Unas veces alquilan camas y otras habitaciones privadas, por lo que los precios lógicamente varían en consecuencia.
El viajero que prefiera tener un mayor contacto con la gente del lugar puede decidirse alquilar una habitación a alguno de los campesinos de la localidad. Suelen ser casas lo suficientemente cómodas, de gentes muy acogedoras, y se puede estar en régimen de pensión completa. Las zonas donde el agroturismo está más extendido son: alrededores del castillo de Barn, las zonas de montaña y la costa del Mar Negro.